Hasta que se acaba

No soy la mesa en la que puedes venir y poner tu vaso.

No soy el hombro que carga tu bolsa para que tomes descanso.

No soy el camino que tomas cuando buscas un atajo.

No soy el trapo que limpia toda la mierda que dejaste en el plato.

No significa que tenga que soportar cuando tu te equivocas.

La única manera de hacerte un hombre es encargándote de tus asuntos.

No soy el chico nuevo en el barrio al que puedes molestar.

No soy la puta aguja en el pajar que finalmente encontraste.

No soy un viaje en autobús que puedes tomar sin pagar.

Camino a través del fuego y doy amor sólo cuando es igual.

No me digas que no me queje cuando vienes a mi alrededor a tomar lo que no te pertenece.

Deja un comentario